Octubre 31, 2007

Organizaciones campesinas piden la suspensión del Tratado de Semillas

Los Gobiernos no cumplen con las obligaciones mínimas del Tratado, declaran a la conferencia de la ONU
Las Organizaciones Campesinas invitadas a participar a la reunión de la ONU sobre el Tratado que rige el intercambio de semillas para la investigación y la mejora vegetal declararon ayer a los gobiernos reunidos que el Tratado debería ser suspendido. Hablando en nombre de 28 organizaciones campesinas y de la Sociedad Civil,  Ibrahima Coulibaly del ROPPA (Red de Organizaciones Campesinas y de Productores Agrarios de África del Oeste) dijo que “el Tratado, bajo los auspicios de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y Alimentación (FAO) en Roma, tiene que paralizar el intercambio de germoplasma de cultivos - material crítico para la mejora vegetal. La suspensión debe mantenerse hasta que los gobiernos cumplan las obligaciones mínimas del Tratado incluyendo las previsiones financieras básicas”, concluyó el líder campesino africano.


La segunda reunión del Órgano Rector del Tratado Internacional Sobre los Recursos Fitogenéticos para la Alimentación y la Agricultura (“la Ley de la Semilla”), comenzó el lunes y se prevé que dure todo el viernes, está bloqueada - de hecho casi hay un silencio total - porque los 115 gobiernos miembros no han podido conseguir los $ 4,9 millones de dólares necesarios, ni para el funcionamiento mínimo de su Secretariado, ni para mantener los mecanismos básicos de seguimiento que garantizarían el reparto equitativo de los beneficios del intercambio de semillas para la investigación. Los gobiernos tampoco han cumplido su compromiso de aportar fondos para apoyar la conservación in situ (“en los campos”) de las semillas o para el fortalecimiento de las capacidades en todo el Sur.

“Nos enfrentamos con el mayor caso de biopiratería institucional jamás visto” dice Andrew Mushita de la CBDC (una red de programas de conservación desarrollados en 21 países). “De hecho ahora los gobiernos están posibilitando la imposición por parte de las compañías multinacionales de semillas de un régimen legalmente vinculante que obligue al intercambio de semillas campesinas sin beneficios recíprocos’’, dijo Mushita que también se dirijió a los gobiernos.

Otra representante de la sociedad Civil presente en la reunión, Wilhelmina Pelegrina de la SEARICE, una organización filipina, dijo “también esperamos que el Grupo Consultivo sobre Investigación Agrícola Internacional (CGIAR) pare sus intercambios de germoplasma para cumplir con el espíritu del Tratado”. A lo largo de este año 11 institutos del CGIAR han distribuido 100.000 muestras de semillas bajo los términos del Tratado”. “Esperamos que la suspensión sea temporaria, y que los gobiernos recuperen el sentido común rápidamente” dijo Pelegrina.
 

AdjuntoTamaño
Icono PDF Download File0 bytes